Decía Albert Camus, que “la estupidez insiste siempre“, refiriéndose a la guerra como algo rápidamente perecedero, de no prevalecer la estupidez.
Querer jugar con el planeta, como si tuviéramos dos o tres de reserva, por “si las moscas”, es otra de esas sandeces peligrosas que sólo se les puede ocurrir a quién rezuma maldad, protagonismo o peor aún, codicia.
La ONU no ha tomado ninguna decisión, lo cual ya es bastante preocupante. Simplemente contemplar esa posibilidad como otra cualquiera, cuando deberían haberse negado incluso a ponerla encima de la mesa, es ya muy preocupante.
¿Con qué derecho unos pocos países se pueden permitir el derecho de manipular nuestra atmósfera? La única que tenemos! ¿Quiénes serán los responsables si algo sale mal y nuestra atmósfera entra en un proceso irreversible? ¿Quién se lucra con el proceso, que costaría miles de millones de dólares anuales?.
En caso de que se produzca, ¿no deberían correr con los gastos los responsables directos del cambio climático y de la contaminación actual?
Son cientos las preguntas sin respuestas, pero a decir verdad, ¿no llevan jugando con ella desde hace décadas?
Ahora no se esconden, y hablan libremente de ejercer una manipulación sobre la atmósfera, pero durante años, estoy convencido que con conocimiento de ello, han permitido el calentamiento por pura avaricia, sin contemplar una solución diferente al petróleo hasta ahora.
Puede que sea una medida producto de la desesperación, porque como ya señalan muchos expertos, quizás ya no se pueda revertir el cambio climático con solo bajar las emisiones de gases de efecto invernadero. O simplemente nos vuelven a manipular para crear un nuevo negocio de miles de millones de dólares que pagaremos todos.
No sería la primera ni la última vez.

¿Enfriar la atmósfera es viable?
Toda la razón
Interesante el artículo. Enhorabuena